Descripción del proyecto
En este proyecto piloto del consorcio eHealth de la Misión Científica del Principado: “Longevidad y Envejecimiento Activo”, el HUCA exploró el uso de la robótica social en las consultas de rehabilitación de espalda. El punto de partida era la incomodidad de las pacientes jóvenes en un entorno hospitalario para realizar estudios de espalda donde se necesita la total implicación del niño para la colocación de un corsé.
Objetivos
El objetivo principal consistía en minimizar el impacto negativo a la hora de realizar esta prueba y la ansiedad que puede generar llevar un corsé a diario:
• Aplicar tecnologías digitales para reducir patologías crónicas de espalda.
• Mejorar la interacción con las pacientes más jóvenes y captar su atención.
• Minimizar la ansiedad en las consultas de toma de medidas de corsés.
• Facilitar el acceso de la tecnología al paciente atendiendo a su edad y situación.
¿Cómo se desarrolló el proyecto?
A través del robot social NAO, y en colaboración con el equipo médico del HUCA (Hospital Universitario Central de Asturias) liderado por el Dr. Fidalgo, Alisys desarrolló una aplicación para este robot que incorporaba un dialogo práctico, ameno y amigable. Con él, las jóvenes se sentirían más cómodas y participativas a través de canciones, mensajes, bromas y movimientos.
Desde Alisys y en constante contacto con el HUCA, se realizaron pruebas de interacción antes de ponerlo en marcha con pacientes reales. Tras distintas sesiones preliminares, los expertos en diseño de interacción, lingüística y robótica social de la compañía fueron puliendo la aplicación del robot para hacerlo más real y similar a la comunicación humana. A su vez, también se fue ensayando hasta dar con el tiempo adecuado de la conversación.
Alisys intervino en todo el proceso creativo, además del propio desarrollo de software y programación del robot, desde el diseño del diálogo inicial hasta su total implantación personalizada.
La conexión emocional: punto clave del proyecto
El éxito del proyecto se debe a la suma de varios factores, aunque sin duda la conexión emocional con las pacientes fue clave para lograr los objetivos marcados.
Desde que la menor accedía a la sala hasta que le tomaban las medidas y se iba, NAO se convertía en su “asistente personal de acompañamiento” haciéndole reír, proponiéndole preguntas sobre ocio y cultura para su interacción y, también, generando nuevas destrezas para asumir los pasos a seguir de forma clara y directa.
El corsé es un elemento que hay que usar a diario y al conectar emocionalmente con las menores se hizo más sencillo que se enfrentaran a esa realidad fuera del centro sanitario y para salir con el corsé ya adaptado.
